viernes, marzo 31, 2006

Acerca de "Mi perro dinamita"

Para mí, "Mi perro dinamita" habla de un perro y de mucho más que un perro. Es verdad que es un tema considerado mal considerado careta dentro de la tribu ricotera debido a la difusión que ha tenido (basicamente porque en el momento de salir fue elegido como cortina de un programa careta de TV). Por otro lado su forma genérica responde al más cuadradito, conservador y divertido rock´n´roll con lo cual pareciera que no es primer tema.

Pero lo que importa del tema no es su difusión -que va más allá de los redondos y del tema mismo- y tampoco en verdad la historia de un perro real o imaginario. Yo creo que lo que importa es la actitud que demuestra el perro. El perro dinamita no es un perro como cualquier otro, es un perro "anti-perro". Es un perro que se niega a mantener las características que hacen al perro el mejor amigo del hombre.

¿Vieron que un tipo puede pegarle a su perro y después llamarlo y el perro viene con la cola entre las patas, como si nada? Traten de hacer lo mismo con un gato y lo más probable es que al primer manotazo te tajee medio brazo y después por más que lo llames te va a mirar como diciendo "andá a cagar, pelotudo!". Los gatos tienen una personalidad de la que los perros carecen. Los perros son sumisos a su amo mientras que los gatos no tienen amo, son anarcos.

Decir que "no le gusta ladrar a lo bobo" como a otros perros, es decir que sólo se manifiesta o se queja cuando hay un motivo real. ¿Por qué entonces habría de andar corriendo a lo bobo y recuperando palitos? ¿Quien se entretiene tirando palitos a un perro, haciendolo correr y cansarse para una misión inutil y estúpida?

No es un perro como cualquier otro y lo sabe, y por eso este es su rocknroll. Porque el rock´n´roll tambien se caracteriza por ser históricamente una contracultura, un mensaje en contra del mensaje conservador que nos convierte a todo en perros peleando por la mirada del amo. Y este perro dinamita es un alegato en contra de la sumisión, del sistema, de la jerarquía, así que puede reconocerte como su amigo, pero no como su amo. Porque desobedecerte es lo mejor que hace. No mueve el rabo con docilidad, no da la patita, no se hace el muertito. La actitud de este perro es loable. No se entretiene ni entretiene a su amo con boludeces. Esta fiero (atrevido) como un tártaro (como un rumano de la zona de Tartaria, lugar que incluye la famosa Transilvania) pero no ladra a lo bobo, sino que lo hace sólo por buenos motivos, vale decir que no hay que quejarse de cualquier cosa, sino que hay que tener una actitud crítica pero no criticona.

Que el perro la vaya de rififí (se agrande porque le hicieron un rocknroll) me suena a una nota de color del tema, una línea de simpatía hacia ese animal que nos enseña que la docilidad es mala consejera.

Buddy